Por: Jesùs Miguel Sierra
PROTESTA
El garrote golpeaba la parte lateral de su muslo al mismo tiempo que era objeto de agravios verbales, al parecer a su amo no le importaba la estrecha relación que existía entre ellos y por el contrario no vacilaba en repetir los golpes y los insultos que lo obligaban a apurar el paso, esa estrecha relación era producto de un caminar diario hacia las montañas, de una ayuda incansable que le brindaba su lomo, soportado por cuatro patas que ahora y como todos los días marchaban al paso que les marcaba el garrote. Todos los días madrugaban hacia el monte a recoger cosechas y trabajar en las 7 hectáreas que poseía aquel despiadado personaje de abarcas y sombrero a las afueras del pueblo, como el decenas de personas contaban con un ayudante que no les cobraba ni le exigía prestaciones sociales, ¡solo agua y un buen pasto para levantarme todos los días con el mayor de los gustos mi amo! Exclamaban sin ser escuchados los cuadrúpedos.
Estos trabajadores por naturaleza y tenaces colaboradores de las labores del campo sufrían a diario los maltratos de sus dueños, quienes no les importaba que sus bestias casi rengas del peso de la carga que traían del campo sufrieran además golpes y maltratos solo para agilizar el trote, el burro sinónimo de lerdo, borrico e ignorante muy pronto demostraría lo contrario.
Se acercaba la semana santa de donde proviene lo narrado, san antero córdoba un municipio a orillas de la bahía de cispata con una zona rural bastante productiva y donde el burro cumple una esencial labor, fue protagonista principal del motor que una vez movió y le dio reconocimiento al pueblo, las grandes siembras de arroz cerca de la desembocadura del rio sinú, en donde estos animales eran parte fundamental del transporte de este producto, incluso en honor a esto le brindan un homenaje cada año en semana santa, el famoso festival nacional del burro.
En su idioma, estos animales tiernos y a la vez fuertes se preguntaban entre ellos, ¿qué pasaba? desde cuando ellos eran el costal donde sus amos descargaban toda esa rabia, no entendía por qué eran maltratados, si no hacían otra cosa que ayudar, no podían andar más rápido, ¡la carga era muy pesada, hacían lo que podían, como le hacían entender a todas aquellas personas que ellos con gusto ayudaban, que para eso existían, que les causaba felicidad traer el alimento a casa, que los enorgullecía devolverse a sus casas con la satisfacción de que recorrieron todo el pueblo con su amo y vendieron todo sus productos, pero que no soportaban mas el maltrato, que esos golpes secos en los muslos y en el cuello como indicando para donde tengo que coger sabiendo que este camino lo recorro todos los días les dolían mas en el alma que en el cuerpo, no mas por favor que paren ya, o nos veremos en la penosa obligación de hacer una protesta pacífica pero que paralizara toda una fiesta nacional.
El pasar de los días y el ultraje diario a los que eran sometidos los burros los llevaron a tomar una decisión.
Faltaba una semana para el comienzo de la fiesta en homenaje a ellos, el sábado de gloria era el día más importante, salía una caravana de burros por las calles principales del pueblo cargando a niños, jóvenes, adultos y turistas, todos montan en estos animales para pasear por el pueblo, uno de los burros es escogido para llevar al coprotagonista el señor judas Iscariote representado en un muñeco relleno de aserrín y con pólvora por todo el cuerpo para posteriormente ser quemado en la plaza principal del festiburro, castigo eterno del mayor traicionero de todos los tiempos.
Cautelosamente idearon la forma de ser escuchados de una forma brillante sin llegar a la violencia, sabían que de este modo podrían llegar a ganar respeto y que los tratasen de una manera más digna.
Llego el viernes santo y todo lo tenía planeado, sabían que al día siguiente la sorpresa para sus amos iba ser inmensa, cayó la noche del viernes y el plan de los ingeniosos ejemplares del pueblo comenzó a ejecutarse, desde ese momento estaban fraguando lo que a futuro seria un nuevo concepto sobre los famosos ayudantes del campo.
Durante toda la media noche y la madrugada los asnos se reunirían en un lugar tradicional para sus ancestros y algunos de ese inmenso grupo, habían ideado la manera de que cada uno de los burros de este municipio se informaran de lo que pensaban hacer, la idea no era nueva, era algo que con lo que se vive casi que a diario en este país y que tienen calado en la sociedad colombiana, además de atraer a los medios de comunicación los cuales hacen conocer de estas al mundo.
En la mañana del sábado de gloria todos los que en su patio o en su finca poseían un burro despertaron con una sorpresa, sus ayudantes no estaban, todos los burros de san antero habían desaparecido, y hoy precisamente, hoy día de la burralgata como la bautizaron hace algunos años, inmediatamente se corrió el cuento por todo el pueblo, todos estaban sorprendidos, se imaginaban lo peor, !un castigo de dios por todas las injusticias que se cometían con estos pobres animales!, decían algunos religiosos, entre comentarios y chismes se mantuvieron todos los san antéranos esa mañana de ese misterioso sábado, se acercaba la hora de la burralgata que por lo visto ese año no se haría por obvias razones, ya los medios de comunicación que se encontraban en pueblo habían transmitido como noticia de última hora el extraño caso en san antero, el centro del pueblo estaba abatido de personas que buscaban una respuesta a lo que estaba sucediendo, cerca de las dos de la tarde llega la noticia, dos personas en una moto llegan al centro y gritan al unisonó ¡los burros están en caño de lobos! al sur occidente del municipio y donde hacía muchos años estaban ubicadas las cosechas de arroz, era la antigua ruta que muchos de sus antepasados transitaban a diario los burros querían que su protesta además tuviera un sensación emotiva.
Se habían escondido en un matorral extenso cerca a caño de lobos, lo hicieron tan bien que ninguna persona se percato de la conglomeración de estos animales en la zona
De inmediato una cantidad de gente se dirigieron hacia esa zona, en motos, carros, bicicletas, la sorpresa fue grande cuando todas estas personas se encontraron con una marcha nunca antes vista, los burros marchaban ordenados en cuatro columnas, el perímetro de aquella sorprendente expedición lo cubrían los ejemplares más grandes y fortachones, dejando en la mitad a las hembras, ancianos y burritos, para así parecer imponentes y que las personas que quisieran interrumpir su paso lo pensaran dos veces.
Era una marcha solemne, era los más parecido a las marchas militares donde suenan con firmeza las botas contra el piso, acá no eran botas eran cascos y no eran dos piernas por persona acá eran cuatro patas por burro así que era un ruido ensordecedor, la organización era sorprendente, nadie se salía de la columna donde iba, todo era ordenado, todo era fantástico, la multitud estupefacta por tan pomposa y magnifica marcha se preguntaban ¡y esto que es, desde cuando los animales, los burros son tan inteligentes como para armar algo tan portentoso¡ dice un intelectual que admiraba tan hermoso espectáculo, ¡esa, esa es su PROTESTA, los animales marchaban firmes con la cabeza en alto sin que nada los distraerá, caminaban seguros hacia su destino, la sede del festival nacional del burro.
Los medios de comunicación transmitieron en vivo el sorprendente acontecimiento, algunas personas imprudentes intentaron disolver la caminata pero los burros sólidos como una piedra, no los espantaría nada ni nadie, esta era su PROTESTA, desde este momento los burros serian tratados con respeto y admirados por esta magnífica jornada.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Muy buen aporte, es grato saber q el amor por nuestra cultura nos invade y nos mueve a crear este tipo de blogs, en el q reflejamos lo mejor de nuestra gente, nuestras tradiciones, y nuestro orgullo de ser san anteranos, de vivir en una tierra fructifera, prospera y rodeada de un mar tranquilo, bajo un sol ardiente en el q se refleja la fortaleza de los hombres guerreros y las mujeres emprendedoras, esta es mi tierra, esta es mi gente.
ResponderEliminar